lunes, 5 de diciembre de 2011


Extracto de Tinta Roja - Alberto Fuguet.


...Alfonso comienza a hojear el diario de hoy. Se va directo a las
páginas rojas.
—¿Encontraste algo interesante?
Alfonso salta sorprendido y se da media vuelta.
—Saúl Faúndez, tu jefe por estos cuatro meses —y le da un
ceñidísimo apretón de manos. El metal de sus anillos clava a Fernández.
—Tanto gusto. Lo estaba esperado.
—¿Estoy atrasado?
—No, no, no. Yo me adelanté. Estaba haciendo hora.
—Eso es lo que uno hace aquí. Hora. Esperar entre crimen y crimen.
Y después rellenar páginas y páginas.
Saúl Faúndez es inmenso, ocupa todo el campo visual. Deber medir
una cabeza, cabeza y media, más que Alfonso. Su edad no queda clara
porque su piel se ve ajada, curtida, mal pigmentada, con residuos de un
ser colorín perdido entre sus desgastados genes. Los ojos los tiene
diminutos, escasos, celeste-nublado, y son tantas sus canas que su
engominado pelo ya parece blanco. Cuando habla, frunce el ceño de
modo que sus ojos desaparecen. Con sus frágiles anteojos horizontales
de metal plateado adquiere un aspecto de abuela de cuento: procaz,
desalmada, feroz.
Saúl Faúndez anda de pantalones color agua-de-menta y una ancha
guayabera arriba de su camiseta de malla blanca transparente. Corona
todo con un jockey blanco-invierno. Para ser tan fuerte y torneado, su
vientre es enorme, sietemesino, duro y macizo, inamovible.
—Tenemos seis letras en común.
—¿Disculpe?
—Faúndez, Fernández. Seis letras en común. ¿Te parece una
casualidad?
—No lo sé, señor.
—Saúl.
—Saúl, señor.
—Si eres incapaz de decirme Saúl, trátame de don. No de señor. No
tolero que me tilden como lo que no soy.
—Sí, señor. Digo, don. Don Saúl.
—¿Estás nervioso?
—Un poco.
—Lo peor que te puede pasar es cometer una falta de ortografía.
Relájate, no te voy a morder. ¿Tomas café?
—A veces.
—Cómo que «a veces». ¿Fumas?
—No.
—Puta madre, me mandaron un Opus Dei. ¿A qué edad perdiste la
virginidad? Rápido.
—A los veintiuno, don Saúl.
—¿Con una puta?
—No.
—¿Te gustó?
—Más o menos.
—¿Qué edad tienes?
—Veintitrés.
—Puta que eres pendejo, Pendejo. Puta que te voy a tener que
enseñar huevadas. Sígueme. Vamos al café. Primero el café, el cigarrillo,
la meadita, revisar la pauta que dejó el maraco del Chacal, unas
llamaditas a La Pesca y después a los Pacos. Es la rutina, el día a día.
Después salimos a husmear, lamer la sangre nuestra de cada día antes
de que se coagule. Si tenemos suerte, Pendejo, llegamos tipo tres,
comemos nuestros garbanzos antes de que cierren el casino y
terminamos el despacho antes de las ocho. De ahí te puedes ir a putear.
Saúl Faúndez camina como si bailara un mambo y sus zapatos
blancos, sin calcetines, se resbalan sobre el brilloso suelo. Su carterita
de cuero, una suerte de estuche que cuelga de su muñeca, le da un leve
toque afeminado.
Mientras lo sigue a la máquina del café que está a la entrada de la
redacción, cerca de las oficinas de Rolón-Collazo y del Chacal, Alfonso
divisa a Nadia, que para variar anda de negro, conversando con las
secretarias. El estacionamiento está vacío.


Faúndez se sirve un café y lo llena de azúcar. Seis o siete
cucharadas.
—A ver, cuéntame, ¿por qué un chico con esa cara de bueno que
tienes elige una sección como ésta?
—No la elegí, señor.
—No me digas señor.
—El señor Ortega Petersen me asignó que trabajara... que
aprendiera con usted.
—El maraco del Chacal me quiere cagar, por lo que veo. Y tú, ¿qué
querías?
—Espectáculos.
—De la que te salvaste, Pendejo. Espectáculos sí que es una mafia.
Si quieres putas gratis, dime. Para conseguir choro no hay que chupar
diuca. ¿No sabías?.

4 comentarios:

Mauro Lahore dijo...

que sorpresa! no sabes lo que me alegra que sigas ahí de verdad, sinceramente abandone un poco todo esto por los estudios pero estoy deseando volver con toda la fuerza que supone, veo que tu sigues muy bien y este blog si que es realmente eterno, me alegra tanto que así sea... jaja bueno loreto un beso enorme y espero vover prontito te sigo leyendo! un abrazo

Loreto dijo...

¡Hola Mauro! qué bueno saber que aún estás por ahí, espero que te vaya excelente en tus estudios!! Gracias por tus palabras...un abrazo desde Chile :)

Mauro Lahore dijo...

pues muy bien la verdad menos inglés que por lo que he visto en tu perfil eres una gran conocedora del idioma no? es la única que me queda por recuperar así que espero hacerlo mejor el próximo trimestre.

en estas navidades trabajaré para volver con fuerza al blog, de momento estoy retocando y lavándole la cara pero ya lo he hecho .com la dirección es: www.dateiu.com :) ya te iré avisando de las novedades, un abrazo.

Loreto dijo...

Espero que te vaya muy bien en Inglés! un consejo: practica cada vez que puedas, y lee Inglés en voz alta, es un buen ejercicio para la pronunciación ;) Un abrazo!